Asegurar un proceso óptimo durante la manipulación del material y garantizar continuamente la pureza del plástico. Nuestros sensores capacitivos y ultrasónicos garantizan niveles de llenado correctos. Y la RFID industrial se encarga del control específico de todos los procesos.

Esto garantiza que los gránulos, las cargas y los materiales de refuerzo se transporten con una precisión milimétrica desde el silo hasta la estación de mangueras, desde la mezcladora hasta la máquina de moldeo por inyección. En diferentes líneas de producción y en cada lote individual. De este modo, se gestiona la dosificación exacta de compuestos siempre nuevos en composiciones siempre nuevas de forma rápida, precisa y fiable. Al mismo tiempo, se aumenta la eficacia de la alimentación, se mejora la calidad de la producción y se reducen las reclamaciones. Esto se debe a que la RFID registra continuamente todos los datos del proceso y del producto. Esta documentación continua también crea seguridad jurídica.

Ejemplos de aplicación