24.07.2024
El cambio se une a la constante
Árpád Juhász lleva más de 26 años trabajando en la planta de Balluff en Veszprém (Hungría). Su objetivo: la proximidad al cliente.
Cuando Árpád Juhász habla de su trabajo, lo hace con una sonrisa. Al jefe de Ventas y Marketing de Balluff Hungría le encanta su trabajo. Cuando se le escucha, uno se da cuenta enseguida, y también cuando echa un vistazo a su currículum. Juhász lleva más de 26 años trabajando en Balluff Elektronika Kft, la sede húngara del especialista en sensores y automatización de Veszprém. El Jefe de Ventas y Marketing nunca quiso cambiar de empresa. Al fin y al cabo, su carrera en el especialista en sensores y automatización también se caracterizó por muchos cambios.
Balluff siempre ha sido una empresa de confianza. Y eso no ha cambiado hasta hoy.
Árpád Juhász, Head of Sales & Marketing, Balluff Elektronika Kft.
Una empresa con una visión clara
Es enero de 1998 y Árpád Juhász es un ingeniero eléctrico cualificado con varios años de experiencia profesional, también en el comercio minorista. El joven busca un puesto fijo en el que pueda demostrar su valía y crecer. Durante su entrevista con Balluff, se dio cuenta de que había llegado al lugar adecuado.
"Balluff siempre ha sido una empresa en la que se podía confiar y que siempre ha tenido una visión clara y a largo plazo de la dirección que quería tomar. Y eso no ha cambiado hasta hoy", afirma este hombre de 52 años. Lo que más le sorprendió entonces fue el alto nivel de profesionalidad. "Como recién llegado, podía hacer preguntas a cualquier ingeniero de desarrollo y siempre recibía apoyo, tanto de mis colegas alemanes como húngaros".
A Árpád Juhász le encanta su trabajo en Balluff. Lleva más de 26 años trabajando en la sede húngara de Balluff Elektronika Kft., ahora como jefe de Ventas y Marketing.
El equipo crece
Gracias a sus conocimientos técnicos básicos y a su mentalidad comercial, Juhász se ha adaptado rápidamente a su nuevo puesto. El departamento de ventas de Balluff Elektronika Kft. se encontraba en su fase inicial con un solo compañero más. Árpád Juhász se convirtió en el primer representante regional de ventas y viajó por todo el país como asesor técnico visitando a los clientes.
"Al principio, el mercado húngaro estaba impulsado por las inversiones alemanas", resume Árpád Juhász. Con los años, el equipo creció y los territorios se dividieron geográficamente. Al principio, pequeñas regiones como la República Checa, Eslovaquia y Polonia fueron seguidas por el mercado alemán. El inglés se convirtió en el idioma corporativo, y Balluff Elektronika Kft. pasó a formar parte de la región europea más amplia. En la actualidad, cinco asesores técnicos trabajan en el departamento de ventas de Veszprém. Desde 2009, el propio Juhász dirige el equipo de ventas, que ahora cuenta con 15 personas.
"La venta técnica es un negocio muy complejo en el que los resultados no son visibles de inmediato", dice este nativo de Veszprém. "Pero hemos demostrado paciencia y confianza y hemos impulsado constantemente el desarrollo. Ahora podemos mirar atrás con orgullo y ver un aumento significativo del crecimiento año tras año. Nuestro equipo de asistencia técnica ofrece a nuestros clientes apoyo profesional para sus procesos individuales". Esto es importante porque la amplia cartera de productos de Balluff se utiliza en numerosos ámbitos, desde el mantenimiento hasta el desarrollo.
Amplia red de contactos
La proximidad al cliente es un tema que el jefe de ventas y marketing de Hungría tiene muy en cuenta. "A finales de los años 90, nuestra principal tarea era familiarizar a los clientes con la tecnología de sensores. Nuestro papel no era sólo vender, sino también formar", recuerda.
Por eso era tan importante crear una amplia red de contactos. Con este fin, a menudo invitaba a clientes a Veszprém para que se familiarizaran con las condiciones de producción. Una medida que le sigue gustando utilizar hoy en día, sobre todo con clientes que todavía no conocen muy bien Balluff.
26 años han pasado volando
Cambios, o mejor dicho, apertura precisamente a estos cambios: Este es el hilo conductor de la carrera profesional de Árpád Juhász. Este marido y padre de dos hijos adultos también es activo en su tiempo libre: juega y ve el fútbol, por ejemplo. "También me gusta leer libros y ver vídeos informativos". Al recordar hoy los últimos 26 años en Balluff, dice que han pasado volando. Con innumerables retos y emocionantes tareas incluidas.
Por ejemplo, la creciente competencia en Hungría en el campo de la tecnología de sensores, que también repercutió en las ventas de la empresa. La respuesta de Balluff Elektronika Kft: un compañero de ventas "interno" que mantiene el contacto con los clientes de Veszprém y se informa regularmente de sus necesidades. Esto ha aumentado la satisfacción, especialmente entre los clientes más pequeños. "La filosofía de Balluff es ofrecer el mismo nivel de servicio de primera clase a sus socios de todo el mundo, independientemente del tamaño de la empresa", explica Juhász.
El mismo nivel de servicio de primera clase para todos: Árpád Juhász se centra en el cliente. Además: la apertura al cambio que recorre como un hilo rojo su carrera.
Rostros detrás de las empresas
Otro avance que ha repercutido en los procesos empresariales ha sido la creciente digitalización, por ejemplo en forma de una moderna tienda web. "Hace veinte años se esperaba que produjéramos catálogos impresos, pero hoy ya nadie los pide", dice Árpád Juhász y se ríe. Pero ya sean digitales o analógicos: Para el Director de Ventas y Marketing de Hungría, sigue siendo crucial mostrar a sus clientes las caras que hay detrás de Balluff. "Hoy en día se puede comprar de todo en Internet. Hay mucha oferta, lo que crea una competencia de precios. Pero la pregunta es: ¿qué más podemos ofrecer como empresa para que la gente nos siga eligiendo en el futuro?", dice Juhász. "Si reciben el nivel adecuado de apoyo profesional, acudirán a nosotros. Nuestro enfoque hacia los clientes es responder a sus necesidades y ofrecerles nuestra experiencia en consultoría de aplicaciones, desde la preventa hasta el servicio técnico postventa."
A pesar de todos los cambios: Árpád Juhász nunca se ha arrepentido de su constante Balluff en la vida. "A menudo me han preguntado si nunca he querido cambiar de empresa. Y sí, ha habido consultas cautelosas". Sin embargo, nunca ha sentido verdadera necesidad de cambiar de empresa. "En Balluff fui testigo y acompañante habitual de muchas evoluciones, y por tanto también de cambios. Y llegué a conocer muchas empresas. Nunca tuve la sensación de encontrar un lugar mejor. Por eso nunca me he arrepentido de quedarme".