Control de calidad

Las exigencias de calidad de los fabricantes son altas desde hace años y siguen creciendo. Ya no basta con fabricar un producto de alta calidad sino que se espera que los productos de calidad se fabriquen a tiempo y, sobre todo, que los componentes parciales se entreguen en el orden correcto. Además la producción debe ser transparente para todos los participantes respecto a la trazabilidad de los productos.

Como la calidad es un parámetro fundamental en cualquier proceso de fabricación se deben mejorar los procedimientos continuamente y todas las partes involucradas están obligadas a contribuir en la fase temprana del proceso al control de calidad.

Gracias a las soluciones integradas para la prevención de fallos en el mismo proceso es posible rastrear cada procedimiento. Nuestros sensores facilitan la realización de estas soluciones de poka-yoke. Además, deben tomarse medidas que permitan una rápida adaptación si cambian las exigencias.

Poka-yoke de Balluff permite una calidad continua gracias a la identificación de los puntos problemáticos, la implantación de una detección de errores y el control de las desviaciones.