La automatización es difícilmente concebible sin sensores inductivos. Desde la construcción de máquinas y la producción electrónica hasta la intralogística, pasando por la técnica de montaje y manipulación, el procesamiento de madera y textil: dondequiera que se produzca la automatización, se exige la detección de posición sin contacto de objetos metálicos, la ausencia de desgaste y la fiabilidad. Para ello, Balluff ofrece ahora una nueva gama optimizada de sensores inductivos BES.

Los sensores, robustos y precisos, están diseñados para el entorno estándar de la fábrica y ofrecen precisamente aquí una excelente relación calidad-precio. Esto los hace especialmente adecuados para aplicaciones que no son técnicamente inusuales, pero que plantean mayores exigencias a los sensores en cuanto a precio y volumen - por ejemplo, en la manipulación de materiales, el montaje de células de baterías o la (intra)logística.

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Con el soporte de pinza disponible opcionalmente, los sensores pueden montarse rápidamente sin herramientas y, en caso necesario, intercambiarse "plug and play".

Una vez montado fácilmente el sensor, su parte trasera de plástico especialmente desarrollada con LED le ofrece una visualización funcional de 360° del estado del sensor. Además del estado de conmutación, ahora también muestra su alimentación y el estado de fallo, por ejemplo, cortocircuito. De este modo, tendrá todo a la vista, identificará los fallos con mayor rapidez y facilidad, reducirá los tiempos de inactividad y aumentará la disponibilidad del sistema.